Podemos contratar infraestructura como servicio para nuestra empresa por una variedad de motivos: seguridad, necesidad de espacio, requerimientos de una red privada para el negocio, etc. Una de esas necesidades puede ser el alojamiento del software empresarial, que no queremos que esté solamente en un ordenador personal, sino que se encuentre en un servidor seguro, rápido y potente, generalmente contratado en un proveedor de hosting que trabaja con un data center donde se cumplen todas las condiciones de mantenimiento.

Sin embargo, muchas empresas prefieren no asumir el coste ni el tiempo de mantenimiento derivado de tener un servidor dedicado propio. Para no complicarse la vida, por ejemplo si quieres llevar la gestión online de tu negocio, una alternativa es apostar por programas o servicios en la nube, ya que el proveedor ya dispone de servidores en los que está alojado el programa. Te ahorras tener que estar pagando por un servidor, la licencia del programa y el mantenimiento del hardware, ya que de esto se ocupa la empresa.

¿En qué te beneficia la nube antes que contratar servidores propios?

Fundamentalmente, te facilita mucho las cosas cuando tus necesidades de almacenamiento y velocidad son muy específicas. Por ejemplo, quizás lo único que quieres es usar un servicio determinado, pero no tienes los conocimientos necesarios para llevar un buen mantenimiento del servidor. Quieres crear una tienda online, pero no te apetece descargarte un Prestashop e instalarlo en tu propio servidor, porque no lo controlas hasta ese punto y preferirías utilizar su servicio en la nube. Cuando se da este caso, lo mejor sin duda es hacer aquello que más seguro te resulte.

¿Por qué? Porque cuando se contrata un servidor dedicado, a menos que delegues la administración del servidor en el proveedor por un precio extra, tienes que ocuparte de la monitorización y el control de la seguridad de tu máquina. No dispones de ella físicamente cerca, pero puedes hacerlo de forma remota conectándote por SSH con Putty o cualquier otro programa por el estilo.

Si no tienes conocimientos de administración de servidores (en el sistema operativo en el que los hayas contratado, que generalmente será Linux), te va a ser muy difícil ocuparte de mantenerlo seguro. El riesgo que corres contratando un servidor dedicado sin administrarlo puede ser muy alto, ya que pueden suceder una serie de problemas para los que no estés preparado. Te pueden hacer un ataque D-DOS, o alguien puede intentar introducir malware a través de algún resorte de tu web donde el código no era perfecto, etc., y necesitarías estar preparado.

La mejor manera de no correr riesgos en este aspecto es contratar directamente un programa en la nube y acceder con seguridad mediante un usuario y contraseña, con lo que te ahorras la compleja tarea de mantener el servidor, o tener que pagar por su administración.

¿Y tú, qué prefieres, usar la nube, o contratar un servidor dedicado y almacenar ahí los programas y webs que quieras?